Tristán Suárez volvió a jugar la Copa Argentina después de 3 años pero no hubo sonrisas. Atlético Tucumán le ganó 1-0 y lo despidió rápido del certamen.
Cancha maldita la de Arsenal dónde el Lechero no puede ganar ni marcar un gol desde hace 54 años y para colmo, el gol llegó luego de un confuso episodio que tuvo como protagonista a un conocido de la casa: Juan Ignacio Mercier.
El Tristán Suárez versión 2018/19 mostró pocas caras nuevas en Sarandí (Avendaño, Carrasco y Martín), pero un estilo similar al que se vio en el torneo anterior, dónde la búsqueda por los costados y la asistencias a los dos de arriba -gran trabajo de Luis López-, son fundamentales.
No jugó mal el equipo de Daniel Bazán Vera ante un tibio Decano que tuvo algo más la pelota pero que no hizo pasar demasiados sustos a Jara.
Es más, la más clara del partido la tuvo el Lechero con una pelota en el palo que estrelló Juan Matín y que en el rebote tomó el arquero Sánchez.
El partido era parejo y se encaminaba a los penales hasta que a los 34 del ST, Trinidad quedó tendido en el césped, el Pichi no la tiró afuera y siguió la jugada que culminó con el remate de Díaz para el 1-0.
El Lechero se fue con un gusto amargo, no tanto por la derrota sino más como se dio. Pero mostró un buen nivel ante un equipo que jugará los octavos de la Libertadores y es el último subcampeón de la Copa Argentina.
Cerca estuvieron los del Indio Bazán Vera de llevarlo a los penales, lefalló faltó un Pichi, nada más.
El Show del Sur
Cancha maldita la de Arsenal dónde el Lechero no puede ganar ni marcar un gol desde hace 54 años y para colmo, el gol llegó luego de un confuso episodio que tuvo como protagonista a un conocido de la casa: Juan Ignacio Mercier.
El Tristán Suárez versión 2018/19 mostró pocas caras nuevas en Sarandí (Avendaño, Carrasco y Martín), pero un estilo similar al que se vio en el torneo anterior, dónde la búsqueda por los costados y la asistencias a los dos de arriba -gran trabajo de Luis López-, son fundamentales.
No jugó mal el equipo de Daniel Bazán Vera ante un tibio Decano que tuvo algo más la pelota pero que no hizo pasar demasiados sustos a Jara.
Es más, la más clara del partido la tuvo el Lechero con una pelota en el palo que estrelló Juan Matín y que en el rebote tomó el arquero Sánchez.
El partido era parejo y se encaminaba a los penales hasta que a los 34 del ST, Trinidad quedó tendido en el césped, el Pichi no la tiró afuera y siguió la jugada que culminó con el remate de Díaz para el 1-0.
El Lechero se fue con un gusto amargo, no tanto por la derrota sino más como se dio. Pero mostró un buen nivel ante un equipo que jugará los octavos de la Libertadores y es el último subcampeón de la Copa Argentina.
Cerca estuvieron los del Indio Bazán Vera de llevarlo a los penales, le
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