¿Habrá sido un espejismo? La realidad indica que poco queda, desde el juego, de aquel Argentino de Quilmes de cinco triunfos consecutivos. El conjunto dirigido por Pedro Monzón cada vez juega peor y sigue dejando pasar oportunidades de reacomodarse en la tabla. Este sábado sumó otra derrota, como local y encima merecida, porque Sportivo Barracas mostró un mejor argumento y aprovechó una pelota para sacar diferencia en el segundo tiempo.
Mal momento para el Mate, cuando nos aproximamos a la parte definitoria de la primera rueda. Por segunda vez en la semana, el equipo jugaba en su cancha. Y tras el triunfo ante Dock Sud, estaba la posibilidad de hacer un pleno: sumar seis de seis le hubiera permitido quedar bien ubicado en el lote principal de la tabla de posiciones. Pero claro, el rendimiento fue muy pobre.
En una especie de continuidad de lo que viene mostrando en las fechas pasadas, Argentino no muestra un patrón de juego, perdió manejo de pelota y encima, lentamente vuelve a dar ventajas defensivas, un problema que parecía solucionado desde la llegada del Moncho. Ante este panorama, está a la vista la involución del equipo y esto fue bien aprovechado por la visita.
Lo increíble es que Barracas viene realizando una mala campaña y, pese a eso, salió a no dejarse llevar por delante en la barranca. Tuvo algunas claras en el primer tiempo y en el arranque del segundo, cuando apenas iban ocho minutos, el ex Bera Sergio Salomone aprovechó un balón dentro del área para sacar la diferencia.
A partir de ese instante, todo fue desesperación y apuro de parte de un conjunto local que empezó a meter más hombres en campo contrario pero que siempre mostró la incapacidad de no saber cómo quebrar a un rival que se defendió con criterio. Esa desesperación hizo que, sobre el cierre, el Mate se quedara con diez por una correcta expulsión de Matías Villavicencio.
Derrota que no estaba en los papeles, pero que demuestra una realidad. El equipo volvió a caer en un pozo futbolístico del que le está costando salir. En una temporada que arrancó complicada, deberá reencontrarse con sus ideas, una vez más.
Deportes en Quilmes
Mal momento para el Mate, cuando nos aproximamos a la parte definitoria de la primera rueda. Por segunda vez en la semana, el equipo jugaba en su cancha. Y tras el triunfo ante Dock Sud, estaba la posibilidad de hacer un pleno: sumar seis de seis le hubiera permitido quedar bien ubicado en el lote principal de la tabla de posiciones. Pero claro, el rendimiento fue muy pobre.
En una especie de continuidad de lo que viene mostrando en las fechas pasadas, Argentino no muestra un patrón de juego, perdió manejo de pelota y encima, lentamente vuelve a dar ventajas defensivas, un problema que parecía solucionado desde la llegada del Moncho. Ante este panorama, está a la vista la involución del equipo y esto fue bien aprovechado por la visita.
Lo increíble es que Barracas viene realizando una mala campaña y, pese a eso, salió a no dejarse llevar por delante en la barranca. Tuvo algunas claras en el primer tiempo y en el arranque del segundo, cuando apenas iban ocho minutos, el ex Bera Sergio Salomone aprovechó un balón dentro del área para sacar la diferencia.
A partir de ese instante, todo fue desesperación y apuro de parte de un conjunto local que empezó a meter más hombres en campo contrario pero que siempre mostró la incapacidad de no saber cómo quebrar a un rival que se defendió con criterio. Esa desesperación hizo que, sobre el cierre, el Mate se quedara con diez por una correcta expulsión de Matías Villavicencio.
Derrota que no estaba en los papeles, pero que demuestra una realidad. El equipo volvió a caer en un pozo futbolístico del que le está costando salir. En una temporada que arrancó complicada, deberá reencontrarse con sus ideas, una vez más.
Deportes en Quilmes
Comentarios
Publicar un comentario