Esmerado triunfo de Temperley sobre San Martín de San Juan y más allá del juego de palabras con el apellido del DT, no hay palabra que defina mejor este valioso triunfo.
No le sobro nada, pero nada. Pero el Gasolero volvió a ser una maquina de fabricar testosterona en cada pelota, en cada jugada.
Salió a comerselo crudo a su rival desde entrada. El corner de Leonardo Di Lorenzo y el cabezazo justo de Adrián Arregui desató la euforia en el Beranger cuando apenas se jugaban 3 minutos. Sí, los dos sobrevivientes en cancha de los soldados de Rezza, era todo un presagio.
Luego, a sufrir. Algo que el hincha del Cele puede dar catedra. Por que San Martín se fue con todo a buscarlo. Adrián Scifo se disfrazó de Bojanich y sacó todo con todo. Jsoúe Ayala se mostró seguro e Ignacio Bogino estuvo firme en la marca.
Pero la noche se iba a complicar, primero con la lesión de Marcos Figueroa que estaba teniendo un gran partido y ya en el complemento con la expulsión de Ramiro Costa por doble amarilla.
El Celeste se remangó y aguantó todo el segundo tiempo.También pudo liquidarlo de contra con los pibes Sebastián Martelli y Lucas Delgado (interesantes juveniles que le dio confianza el DT luego de mucho tiempo sin ver pibes del club del medio para arriba). Pero debía sufrir hasta el final.
Con el pitazo de Abal, se desató la alegría del pueblo Gasolero. Desahogo en medio de una de las situaciones más angustiantes del club desde que está en Primera.
Temperley no solo volvió a ganar, van dos partidos sin que le hagan goles y eso es sumamente positivo si se mirá hacía atrás.
Triunfo sufrido, pero merecido y que ayuda en lo anímico para encarar los dos compromisos finales del año vitales contra argentinos y Tigre.
Gritalo bien fuerte, lo tenés merecido: ¡¡Ganó el Cele, carajo!! Que la cuenten como quieran.
El Show del Sur
Foto Prensa Temperley
No le sobro nada, pero nada. Pero el Gasolero volvió a ser una maquina de fabricar testosterona en cada pelota, en cada jugada.
Salió a comerselo crudo a su rival desde entrada. El corner de Leonardo Di Lorenzo y el cabezazo justo de Adrián Arregui desató la euforia en el Beranger cuando apenas se jugaban 3 minutos. Sí, los dos sobrevivientes en cancha de los soldados de Rezza, era todo un presagio.
Luego, a sufrir. Algo que el hincha del Cele puede dar catedra. Por que San Martín se fue con todo a buscarlo. Adrián Scifo se disfrazó de Bojanich y sacó todo con todo. Jsoúe Ayala se mostró seguro e Ignacio Bogino estuvo firme en la marca.
Pero la noche se iba a complicar, primero con la lesión de Marcos Figueroa que estaba teniendo un gran partido y ya en el complemento con la expulsión de Ramiro Costa por doble amarilla.
#TNTSports | Figueroa se fue lesionado entre lágrimas. pic.twitter.com/2Qqe4HvjaC— TNT Sports LA (@TNTSportsLA) 28 de noviembre de 2017
El Celeste se remangó y aguantó todo el segundo tiempo.También pudo liquidarlo de contra con los pibes Sebastián Martelli y Lucas Delgado (interesantes juveniles que le dio confianza el DT luego de mucho tiempo sin ver pibes del club del medio para arriba). Pero debía sufrir hasta el final.
#TNTSports | Martelli se animó y probó desde afuera. pic.twitter.com/AvFC80GLY7— TNT Sports LA (@TNTSportsLA) 28 de noviembre de 2017
Con el pitazo de Abal, se desató la alegría del pueblo Gasolero. Desahogo en medio de una de las situaciones más angustiantes del club desde que está en Primera.
Temperley no solo volvió a ganar, van dos partidos sin que le hagan goles y eso es sumamente positivo si se mirá hacía atrás.
Triunfo sufrido, pero merecido y que ayuda en lo anímico para encarar los dos compromisos finales del año vitales contra argentinos y Tigre.
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Gritalo bien fuerte, lo tenés merecido: ¡¡Ganó el Cele, carajo!! Que la cuenten como quieran.
El Show del Sur
Foto Prensa Temperley
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