De la mano de los zurditos y del insaciable Bou, la Academia le ganó
al siempre complicado Unión y se volvió para Avellaneda con una victoria
que lo acerca a la punta. El campeón está de vuelta: quedó a tres de
Boca y San Lorenzo.
En busca de la felicidad. De repetir la gloria. De volver a ser el mismo. Racing va y va. Va de la mano de los zurditos y del insaciable Bou, que mientras todos hablan la sigue metiendo: con su gol y el del paraguayo Romero, la Academia le ganó al siempre complicado Unión y se volvió para Avellaneda con tres pepitas de oro que lo acercan a la punta: ahora está a sólo una victoria de los líderes Boca y San Lorenzo.
El frente de izquierda fue demasiado para el equipo de Madelón. Los seis zurdos que puso Cocca le dificultaron la tarea a un Tatengue que venía de dar la sorpresa al vencer por 4-3 a Boca en la Bombonera. Con ellos en cancha, Racing hizo un primer tiempo notable, sobre todo después de que Romero la mandara a guardar con un remate de media distancia y algo de suerte, ya que en el medio hubo un desvío en uno de los defensores de Unión que descolocó a Nereo. Así empezó a construirse el triunfo racinguista. Uno que encontró al Bou del campeonato pasado, encendidísimo pese a que todavía no se haya resuelto el tema del mejoramiento de su contrato. ¿Cómo no mejorárselo? ¿Vio lo que inventó para el 2-0? Tremendo. Como en su mejor momento. Bombazo y adentro.
Cómodo con el resultado, para el complemento Racing decidió apostar al contragolpe. Le cedió la pelota a Unión, se metió atrás e intentó salir rápido en busca de un tercer tanto que liquidara el partido. Contra que nunca llegó, porque a pesar de haber tenido alguna siempre se equivocó en el último pase. ¿Si acertó en meterse atrás? Teniendo en cuenta el resultado final, fue negocio. Aunque si el cabezazo de Villar hubiera ido adentro en lugar de rebotar en el travesaño la historia habría sido otra. Imagínese nada más la frustración en caso de que el descuento de Sánchez en tiempo adicionado hubiese significado el 2-2. ¿Entonces por qué no mantener el ritmo?
Más allá de todo esto a Racing le alcanzó. Y de la mano de los zurditos y Bou se llevó una victoria importantísima. Una que lo hace escalar en la tabla. Una que lo pone a tiro de los de arriba.
Fuente
Goles
En busca de la felicidad. De repetir la gloria. De volver a ser el mismo. Racing va y va. Va de la mano de los zurditos y del insaciable Bou, que mientras todos hablan la sigue metiendo: con su gol y el del paraguayo Romero, la Academia le ganó al siempre complicado Unión y se volvió para Avellaneda con tres pepitas de oro que lo acercan a la punta: ahora está a sólo una victoria de los líderes Boca y San Lorenzo.
El frente de izquierda fue demasiado para el equipo de Madelón. Los seis zurdos que puso Cocca le dificultaron la tarea a un Tatengue que venía de dar la sorpresa al vencer por 4-3 a Boca en la Bombonera. Con ellos en cancha, Racing hizo un primer tiempo notable, sobre todo después de que Romero la mandara a guardar con un remate de media distancia y algo de suerte, ya que en el medio hubo un desvío en uno de los defensores de Unión que descolocó a Nereo. Así empezó a construirse el triunfo racinguista. Uno que encontró al Bou del campeonato pasado, encendidísimo pese a que todavía no se haya resuelto el tema del mejoramiento de su contrato. ¿Cómo no mejorárselo? ¿Vio lo que inventó para el 2-0? Tremendo. Como en su mejor momento. Bombazo y adentro.
Cómodo con el resultado, para el complemento Racing decidió apostar al contragolpe. Le cedió la pelota a Unión, se metió atrás e intentó salir rápido en busca de un tercer tanto que liquidara el partido. Contra que nunca llegó, porque a pesar de haber tenido alguna siempre se equivocó en el último pase. ¿Si acertó en meterse atrás? Teniendo en cuenta el resultado final, fue negocio. Aunque si el cabezazo de Villar hubiera ido adentro en lugar de rebotar en el travesaño la historia habría sido otra. Imagínese nada más la frustración en caso de que el descuento de Sánchez en tiempo adicionado hubiese significado el 2-2. ¿Entonces por qué no mantener el ritmo?
Más allá de todo esto a Racing le alcanzó. Y de la mano de los zurditos y Bou se llevó una victoria importantísima. Una que lo hace escalar en la tabla. Una que lo pone a tiro de los de arriba.
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Goles
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