En un partido cerrado, el “Tricolor” se trajo tres puntos de oro de
su excursión a Munro y se colocó a uno de Defensores de Belgrano, que
cayó de visitante ante Morón. En un duelo correspondiente a la
vigesimonovena fecha del Torneo de Primera B Metropolitana, el conjunto
dirigido por Pablo Vicó encontró la diferencia en el complemento y tuvo
la capacidad para poder aguantarla.
En la primera mitad, Colegiales impuso una presión asfixiante en la mitad de la cancha, impidiendo que los jugadores creativos de la visita tengan espacios para jugar. Además, ante cada pelotazo largo, su defensa coordinó el pase para dejar a los delanteros en posición adelantada.
Con este panorama, al conjunto browniano se le hizo muy difícil desplegar su fútbol y sólo logró inquietar la valla custodiada por Milton Álvarez, cuando atacó desde las bandas. Alternando buenas y malas, Alejandro Quintana fue el atacante más peligroso de Brown en cancha.
Matías Sproat debió bajar demasiado para tomar contacto con el balón y Facundo Lemmo se preocupó más por defender que por ofrecerse como opción de ataque. Con un trámite entretenido, pero sin grandes emociones, los primeros 45 se fueron con los equipos empatados en cero.
En el complemento el team de Adrogué salió más decidido, ensanchó la cancha y lentamente fue monopolizando la pelota. Guillermo Sánchez se transformó en un jugador determinante las veces que escaló por su sector, filtrando buenas habilitaciones o tirando el centro para la cabeza de un compañero.
Promediando el segundo tiempo, Quintana arrastró a la defensa rival y enfrentó al arquero, pero en vez de buscar su gol, levantó la cabeza y le cedió la pelota a Juan García para que defina solo con el arco a su merced. El “Tricolor” abría el marcador y ponía justicia en el resultado.
Los dirigidos por Juan José Serrizuela se lanzaron con todo en busca de la igualdad. Ante una defensa que se mostró firme, los de Munro encontraron en la pelota parada el arma principal para complicar a su adversario. Sin embargo, el buen momento de los centrales de Brown y la seguridad de Martín Ríos, impidieron cualquier situación de peligro.
En los minutos finales Vicó movió el banco para asegurar el resultado y sumó un nuevo defensor a su última línea. El uruguayo Maximiliano Brito volvió a jugar después de dos partidos y significó una buena opción para aguantar de espaldas y descargar por abajo.
Buena victoria para el elenco sureño que sumó de a tres por quinta vez consecutiva y continúa con su asedio por liderar la tabla de posiciones. La próxima fecha recibirá a Deportivo Armenio en el Arandilla para revalidar su condición de candidato.
Fuente
En la primera mitad, Colegiales impuso una presión asfixiante en la mitad de la cancha, impidiendo que los jugadores creativos de la visita tengan espacios para jugar. Además, ante cada pelotazo largo, su defensa coordinó el pase para dejar a los delanteros en posición adelantada.
Con este panorama, al conjunto browniano se le hizo muy difícil desplegar su fútbol y sólo logró inquietar la valla custodiada por Milton Álvarez, cuando atacó desde las bandas. Alternando buenas y malas, Alejandro Quintana fue el atacante más peligroso de Brown en cancha.
Matías Sproat debió bajar demasiado para tomar contacto con el balón y Facundo Lemmo se preocupó más por defender que por ofrecerse como opción de ataque. Con un trámite entretenido, pero sin grandes emociones, los primeros 45 se fueron con los equipos empatados en cero.
En el complemento el team de Adrogué salió más decidido, ensanchó la cancha y lentamente fue monopolizando la pelota. Guillermo Sánchez se transformó en un jugador determinante las veces que escaló por su sector, filtrando buenas habilitaciones o tirando el centro para la cabeza de un compañero.
Promediando el segundo tiempo, Quintana arrastró a la defensa rival y enfrentó al arquero, pero en vez de buscar su gol, levantó la cabeza y le cedió la pelota a Juan García para que defina solo con el arco a su merced. El “Tricolor” abría el marcador y ponía justicia en el resultado.
Los dirigidos por Juan José Serrizuela se lanzaron con todo en busca de la igualdad. Ante una defensa que se mostró firme, los de Munro encontraron en la pelota parada el arma principal para complicar a su adversario. Sin embargo, el buen momento de los centrales de Brown y la seguridad de Martín Ríos, impidieron cualquier situación de peligro.
En los minutos finales Vicó movió el banco para asegurar el resultado y sumó un nuevo defensor a su última línea. El uruguayo Maximiliano Brito volvió a jugar después de dos partidos y significó una buena opción para aguantar de espaldas y descargar por abajo.
Buena victoria para el elenco sureño que sumó de a tres por quinta vez consecutiva y continúa con su asedio por liderar la tabla de posiciones. La próxima fecha recibirá a Deportivo Armenio en el Arandilla para revalidar su condición de candidato.
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