La punta color Naranja

Berazategui volvió a ser un equipo disciplinado, que sin descollar futbolísticamente, si lo hace desde el orden, la disciplina y el sacrificio, donde cada jugador sabe lo que tiene que hacer, sabe hacer bien los relevos y que se para desde la firmeza desde atrás hacia adelante.

Empezando por su arquero, siguiendo por su linea de cuatro, donde casi todos funcionan bien y cuando hay alguno que falla, siempre hay alguien que lo cubre. El medio no luce, pero es efectivo, es un achique permanente de los jugadores contrarios creativos. Sacino siempre va con el creador, en este caso Ruiz, y lo pasa aparece Macarof. Italiani y Branda, chocan y chocan por las puntas y arriman peligro.

En el primer tiempo Segundo no pudo hacer su juego de toque y despegue para su compañero de ataque Maciel, pero en cambio el que pareció haciendo esa función fue el mismo. La pelota siempre fue de Midland. Berazategui esperaba y se metía contra Hernández, que siempre ganaba en los centros cruzados de los que abuso Midland.

Berazategui estaba a la pesca, hasta que un tiro de Macarof, desde afuera rebotó en Grgona y le dejó servido a Maciel, que tiró desde afuera del área, y la pelota se incrustó en el palo derecho abajo. Uno a cero que abría la posibilidad de jugar de otra forma en el complemento.
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En el segundo tiempo, se replegó un poco, pero como al cancha es de dimensiones reducidas no se notó. Se aglomeró bien, en forma escalonada, con Iglesias que apreció por Branda, y se metió entre los centrales y ayudo y por mas que Mindald avanzaba, lo hacia sin claridad, chocaba y chocaba con Villavicencio, Madero y compañía, y si no aparecía Hernandez con su puños, sus piernas o su cuerpo todo.

Bera de contra, siempre daba la sensación de poder aumentar a pesar que atacaba poco. Y apareció Maciel, presente en ambos goles. El primero de cosecha personal, y en la segunda, vivo la dejó pasar y Segundo emprendió una larga carrera acompañado por Italiani que recogió el rebote en Mansilla tras el tiro del ex San Telmo.


Pudo aumenta de contra, pero fallaba en la puntada final. Así llegó el final, con Midland, chocando contra la férrea defensa de Berazategui y algún contragolpe del Naranja que ilusionaba con la goleada que finalmente no fue.

El equipo del Búfalo Szeszurak, por suerte para toda su gente sigue sorprendiendo a propios y extraños.

Osvaldo Luis
Foto adbclub medios

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