Lo madrugaron

Independiente cayó 1 a 0 en Asunción en el partido de ida por las semis de la Sudamericana ante Libertad. El Rojo mereció empatar pero no logró conseguir el tanto de visitante y ahora deberá darlo vuelta en Avellaneda, en donde no jugarán ni Tacuara Cardozo y ni Tony Bareiro por suspensión.

El Rey de Copas entró al Defensores del Chaco perdiendo y no metafóricamente, sino literalmente hablando. Solamente 25 SEGUNDOS tuvieron que pasar para que el resultado se rompa. Un cabezazo dejó pagando a Alan Franco, y Oscar Cardozo la acomodó con la parte superior de su brazo izquierdo y sacó una volea precisa que Campaña casi ataja. Victor Carillo no vio la infracción del experimentado delantero y dio por válido el tanto.



Como si fuera poco a los 5’, por una grave desatención entre Silva y Campaña, el local tuvo la posibilidad de marcar el segundo. El arquero uruguayo agarró el pase de su compatriota y el árbitro cobró indirecto dentro del área, que por suerte no aprovechó Libertad. Pasados los peores diez minutos desde que Ariel Holan conduce al equipo, el Rojo se despertó y con mucha paciencia controló el balón, obligando al equipo paraguayo a retrasar y cerrar sus líneas. El Tándem, Sanchez Miño – Ezequiel Barco, fue de lo más peligroso. Sin embargo, la situación más clara de la primera etapa fue un pifié del central de Libertad, que el guardameta envió al córner. Independiente salió al complemento, con claras muestras que perder por la mínima diferencia, aunque sea en la ida, y en paraguay, no le servía.

A los 6’ Sánchez Miño tiró un lindo tubo y quiso hacer la misma jugada, que terminó en el gol contra River, pero el que la definió (mal) esta vez fue Diego Rodríguez. Cumplida la hora de juego Martín Benítez saltó a la cancha por Fabricio Bustos, quien retornó tras una lesión y pareció que se retiró con dolor en la zona, sin embargo el técnico lo desmintió en conferencia. Los dirigidos por Holan siempre fueron más, dominaron el juego como en la mayoría de sus partidos, con personalidad y presencia pero no encontraron el empate. Leandro Fernández, quien entró por Gigliotti, tuvo una pero no llegó a conectar el pase de Meza.



A 15 del final, Tacuara Cardozo vio la tarjeta roja por un golpe sin pelota a Franco, en una disputa por el balón, el cual no estaba en juego. Por una calentura el que marcó el único tanto de la noche se quedó sin jugar la vuelta. En el último suspiro Alan Franco llegó hasta la línea de fondo y centró para el jugador más agresivo del Rojo, Juan Manuel Sánchez Miño, que cabeceó con tiempo pero le salió al mismo lugar dónde se encontraba el arquero local.

Una derrota que duele por cómo se dio el partido, Independiente tuvo un inicio para el olvido pero se mostró ampliamente superior en el desarrollo del mismo. El karma de la falta de precisión lo volvió a invadir y vuelve de Paraguay con una derrota no tan negativa, de cara a la vuelta en Avellaneda el próximo martes. Ah, pero antes tendrá que cruzar la vereda y visitar a los vecinos, el sábado por la noche. Dos partido trascendentales de cara al cierre de este 2017.

Franco Niccolini

Comentarios