El campeón del fútbol argentino se había acostumbrado a andar por la
vida acumulando sonrisas pero se topó el domingo con una desagradable
sorpresa que complicó levemente sus aspiraciones de asaltar la punta del
torneo. En el Estadio Marcelo Bielsa, en el retorno a la competencia
oficial luego del receso de invierno, Racing no expuso la solidez que lo
caracteriza y perdió frente a Newell’s por 3 a 0. Sin contundencia en
las áreas, sin grandes rendimientos individuales, la Academia cayó por
primera vez en el campeonato fuera de Avellaneda y no consiguió el
objetivo inmediato de quedar como el líder del certamen.
Fue parejo el partido en el arranque. Como era de esperar, el conjunto de Lucas Bernardi presionó bien arriba e intentó adueñarse de la tenencia de la pelota. La visita no se quedó atrás, buscó molestar al anfitrión en la salida limpia por abajo y trató de marcar diferencias a partir de su dupla de ataque. El cero se destrabó relativamente pronto, antes de que alguno de los dos equipos acumulara méritos como para merecer el gol. Exactamente a los 16 minutos de la primera etapa, luego de una nítida infracción de Franco Escobar sobre Leandro Grimi, Martín Tonso apareció por el segundo palo para definir contra el palo izquierdo de Sebastián Saja y convertir el primero.
Racing apostó por la reacción rápida y apeló a la velocidad de Ricardo Noir contra la banda derecha como mecanismo para producir riesgo. Hubo varias insinuaciones de riesgo que no tuvieron el mejor desenlace y eso impidió empatar enseguida. Luciano Aued, tras una linda maniobra colectiva, pudo haber igualado de derecha. Sin embargo, el balón rebotó en un defensor y, en el contragolpe, Newell’s sacó a relucir su eficacia y aumentó la distancia en el marcador. Iba media hora de encuentro cuando Ignacio Scocco condujo un avance punzante. Mauricio Tévez desbordó por derecha, Tonso envió un buscapié desde la izquierda y el propio Scocco asomó para tocar a la red. Las cosas parecían complicarse sin que fuera demasiado merecido el resultado parcial.
Diego Cocca decidió no cambiar ni los nombres ni el esquema táctico de cara al complemento. Con las piezas en el lugar habitual, la Academia se ilusionó con el descuento que lo pusiera a tiro de la resurrección. Pero no. Pasó lo contrario: Scocco se calzó el traje de goleador y, a los seis de la segunda etapa, capturó un centro desde la derecha y estampó el tercero. A partir de ahí, a la visita todo se le volvió demasiado difícil. Sin poder manejar la pelota, Racing abusó de los envíos divididos y no halló los caminos para torcer el destino. Mariano Pavone debutó reemplazando a Washington Camacho. Santiago Nagüel hizo lo propio por Ezequiel Videla y Gastón Díaz ocupó el lugar de Gustavo Bou. Si bien se generaron algunos avances que podrían haber terminado en gol, lo cierto es que Saja debió mostrar sus reflejos varias veces para preservar su valla.
No le salió a Racing en Rosario y la derrota, en el balance de esta historia, terminó siendo justa. Con las posibilidades intactas de meterse en la pelea grande, lo fundamental será levantarse rápido del tropezón y regresar al triunfo cuanto antes. La ocasión será el sábado próximo, en el Cilindro, contra Sarmiento. El campeón ya demostró en otras circunstancias que sabe bien cómo rectificar el rumbo.
Fuente
Fue parejo el partido en el arranque. Como era de esperar, el conjunto de Lucas Bernardi presionó bien arriba e intentó adueñarse de la tenencia de la pelota. La visita no se quedó atrás, buscó molestar al anfitrión en la salida limpia por abajo y trató de marcar diferencias a partir de su dupla de ataque. El cero se destrabó relativamente pronto, antes de que alguno de los dos equipos acumulara méritos como para merecer el gol. Exactamente a los 16 minutos de la primera etapa, luego de una nítida infracción de Franco Escobar sobre Leandro Grimi, Martín Tonso apareció por el segundo palo para definir contra el palo izquierdo de Sebastián Saja y convertir el primero.
Racing apostó por la reacción rápida y apeló a la velocidad de Ricardo Noir contra la banda derecha como mecanismo para producir riesgo. Hubo varias insinuaciones de riesgo que no tuvieron el mejor desenlace y eso impidió empatar enseguida. Luciano Aued, tras una linda maniobra colectiva, pudo haber igualado de derecha. Sin embargo, el balón rebotó en un defensor y, en el contragolpe, Newell’s sacó a relucir su eficacia y aumentó la distancia en el marcador. Iba media hora de encuentro cuando Ignacio Scocco condujo un avance punzante. Mauricio Tévez desbordó por derecha, Tonso envió un buscapié desde la izquierda y el propio Scocco asomó para tocar a la red. Las cosas parecían complicarse sin que fuera demasiado merecido el resultado parcial.
Diego Cocca decidió no cambiar ni los nombres ni el esquema táctico de cara al complemento. Con las piezas en el lugar habitual, la Academia se ilusionó con el descuento que lo pusiera a tiro de la resurrección. Pero no. Pasó lo contrario: Scocco se calzó el traje de goleador y, a los seis de la segunda etapa, capturó un centro desde la derecha y estampó el tercero. A partir de ahí, a la visita todo se le volvió demasiado difícil. Sin poder manejar la pelota, Racing abusó de los envíos divididos y no halló los caminos para torcer el destino. Mariano Pavone debutó reemplazando a Washington Camacho. Santiago Nagüel hizo lo propio por Ezequiel Videla y Gastón Díaz ocupó el lugar de Gustavo Bou. Si bien se generaron algunos avances que podrían haber terminado en gol, lo cierto es que Saja debió mostrar sus reflejos varias veces para preservar su valla.
No le salió a Racing en Rosario y la derrota, en el balance de esta historia, terminó siendo justa. Con las posibilidades intactas de meterse en la pelea grande, lo fundamental será levantarse rápido del tropezón y regresar al triunfo cuanto antes. La ocasión será el sábado próximo, en el Cilindro, contra Sarmiento. El campeón ya demostró en otras circunstancias que sabe bien cómo rectificar el rumbo.
Fuente
Comentarios
Publicar un comentario