Regresaron las sonrisas en el Mate: volvió a ganar luego de tres empates
y una caída. Argentino de Quilmes dio el golpe en tierra ajena: derrotó
3-1 a San Martín de Burzaco por la 18ª jornada del Torneo 2015 y quedó
segundo en la tabla de posiciones de la Primera C.
El equipo que dirige Oscar Santángelo se impuso con goles de Aníbal Leguizamón y con dos del delantero Sergio Valenti, que jugó su mejor partido desde su arribo en el Mate.
No fue un partido sencillo para el equipo quilmeño, que visitó a San Martín con las bajas de Tello, Arias y Espínola. Tampoco fue un camino de rosas pese a comenzar ganando con un violento zurdazo de Aníbal Leguizamón, que había madrugado a todos a los tres minutos. Costó, pero el elenco Albiceleste juntó fuerzas para adelantarse en el marcador y levantarse en el momento oportuno.
El encuentro comenzó auspicioso para el Mate, ya que Aníbal Leguizamón con su potente volea se había adelantado en el marcador. Luego del primer golpe, los de Santángelo continuaron presionando la salida del rival e intentaron imponer su juego. El elenco que conduce Cristian Ferlauto apostó a lastimar a Argentino mediante la pelota parada: generó peligro gracias a los centros de Jorge Coria, el más preciso del local. Además, lo más inquietante de Sanma llegó por tiros de larga distancia del defensor Cristian Brizuela y de David Ledesma.
Argentino de Quilmes continuó dominando el partido, con Lionel Spínola exprimiendo las espaldas de Daniel Cardozo y de Maximiliano Ortigoza y con Sergio Valenti rápido a la hora de pivotear e ir a buscar la pelota. Y la Tribu Azul no pudo encontrar los caminos hacia el arco de enfrente, más allá de un fuerte remate del ex Mate, el Petiso Coria. El conjunto de Santángelo pudo haber marcado el segundo luego de una gran jugada colectiva que finalizó con un pase hacia atrás de Valenti para Rodrigo Benítez, que definió sin fuerza. En el segundo tiempo la historia fue diferente, porque el Mate no pudo sostener la pequeña ventaja. San Martín de Burzaco golpeó rápido y marcó el 1-1 con el gol convertido por Martín Ortiz: el marcador central tomó el rebote luego de tiro libre desde el costado derecho.
A partir del allí, el Mate enfrentó dos retos: sostener el rigor de la marca e ir buscar el segundo gol. De todos modos, no bajó los brazos e intentó herir al rival con juego por abajo respaldado toques cortos.Fue así que seis minutos después, el equipo quilmeño alcanzó el segundo grito a través de una jugada colectiva. Lionel Spínola desbordó a Coria por el sector derecho, el Flaco envió el centro y Sergio Valenti ganó el hueco entre los centrales; el atacante metió un fuerte frentazo afuera del área chica, que dejó sin respuestas a Scurnik. El arquero voló y no pudo llegar. El equipo de Ferlauto sintió el golpe y no pudo reponerse después del 2-1, más allá del ingreso de los delanteros Maximiliano Torres González y Néstor Herrera.
El Mate no se conformó con eso y fue en busca de más: un tiro de treinta metros de Sergio Marclay, que se estrelló en el travesaño, es la prueba de que el equipo quería ampliar la diferencia. Cabe mencionar que el ingreso de los volantes Gustavo Escobar y Rodrigo Sayavedra le dio energía a Argentino. Fue un refresco que se notó en el desarrollo del complemento. Pero cuando parecía que estaba todo dicho, el Mate marcó la diferencia con otro gol del ex Gimnasia. Valenti metió un bombazo con pierna derecha que partió desde el inicio del vértice del área grande y dejó sin chances al porteño Federico Scurnik. El platense lo gritó con alma y vida. Fue su séptimo gol en el campeonato.
El triunfo lo deposita al elenco que conduce el rosarino Santángelo en el segundo lugar de la tabla. Aunque este lugar podría modificarse debido a que Talleres de Remedios de Escalada jugará hoy. El entrenador Mate se retiró conforme del estadio Francisco Boga. Argentino de Quilmes recuperó la memoria y volvió a ser agresivo. Y tuvo su premio.
Fuente
El equipo que dirige Oscar Santángelo se impuso con goles de Aníbal Leguizamón y con dos del delantero Sergio Valenti, que jugó su mejor partido desde su arribo en el Mate.
No fue un partido sencillo para el equipo quilmeño, que visitó a San Martín con las bajas de Tello, Arias y Espínola. Tampoco fue un camino de rosas pese a comenzar ganando con un violento zurdazo de Aníbal Leguizamón, que había madrugado a todos a los tres minutos. Costó, pero el elenco Albiceleste juntó fuerzas para adelantarse en el marcador y levantarse en el momento oportuno.
El encuentro comenzó auspicioso para el Mate, ya que Aníbal Leguizamón con su potente volea se había adelantado en el marcador. Luego del primer golpe, los de Santángelo continuaron presionando la salida del rival e intentaron imponer su juego. El elenco que conduce Cristian Ferlauto apostó a lastimar a Argentino mediante la pelota parada: generó peligro gracias a los centros de Jorge Coria, el más preciso del local. Además, lo más inquietante de Sanma llegó por tiros de larga distancia del defensor Cristian Brizuela y de David Ledesma.
Argentino de Quilmes continuó dominando el partido, con Lionel Spínola exprimiendo las espaldas de Daniel Cardozo y de Maximiliano Ortigoza y con Sergio Valenti rápido a la hora de pivotear e ir a buscar la pelota. Y la Tribu Azul no pudo encontrar los caminos hacia el arco de enfrente, más allá de un fuerte remate del ex Mate, el Petiso Coria. El conjunto de Santángelo pudo haber marcado el segundo luego de una gran jugada colectiva que finalizó con un pase hacia atrás de Valenti para Rodrigo Benítez, que definió sin fuerza. En el segundo tiempo la historia fue diferente, porque el Mate no pudo sostener la pequeña ventaja. San Martín de Burzaco golpeó rápido y marcó el 1-1 con el gol convertido por Martín Ortiz: el marcador central tomó el rebote luego de tiro libre desde el costado derecho.
A partir del allí, el Mate enfrentó dos retos: sostener el rigor de la marca e ir buscar el segundo gol. De todos modos, no bajó los brazos e intentó herir al rival con juego por abajo respaldado toques cortos.Fue así que seis minutos después, el equipo quilmeño alcanzó el segundo grito a través de una jugada colectiva. Lionel Spínola desbordó a Coria por el sector derecho, el Flaco envió el centro y Sergio Valenti ganó el hueco entre los centrales; el atacante metió un fuerte frentazo afuera del área chica, que dejó sin respuestas a Scurnik. El arquero voló y no pudo llegar. El equipo de Ferlauto sintió el golpe y no pudo reponerse después del 2-1, más allá del ingreso de los delanteros Maximiliano Torres González y Néstor Herrera.
El Mate no se conformó con eso y fue en busca de más: un tiro de treinta metros de Sergio Marclay, que se estrelló en el travesaño, es la prueba de que el equipo quería ampliar la diferencia. Cabe mencionar que el ingreso de los volantes Gustavo Escobar y Rodrigo Sayavedra le dio energía a Argentino. Fue un refresco que se notó en el desarrollo del complemento. Pero cuando parecía que estaba todo dicho, el Mate marcó la diferencia con otro gol del ex Gimnasia. Valenti metió un bombazo con pierna derecha que partió desde el inicio del vértice del área grande y dejó sin chances al porteño Federico Scurnik. El platense lo gritó con alma y vida. Fue su séptimo gol en el campeonato.
El triunfo lo deposita al elenco que conduce el rosarino Santángelo en el segundo lugar de la tabla. Aunque este lugar podría modificarse debido a que Talleres de Remedios de Escalada jugará hoy. El entrenador Mate se retiró conforme del estadio Francisco Boga. Argentino de Quilmes recuperó la memoria y volvió a ser agresivo. Y tuvo su premio.
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